Un año y dos meses después de asumir la
vicepresidencia única y la consejería de Empleo de la Junta , la número dos del
actual gobierno de Juan Vicente Herrera,
Rosa
Valdeón, se veía obligada a dimitir de dichos cargos este fin de semana. Sorprendida
por la Guardia Civil
conduciendo su coche particular con una tasa de alcoholemia tres veces por
encima de la permitida, ello minutos después de ser denunciada por un camionero
objeto de un adelantamiento temerario que produjo desperfectos en su vehículo,
la política zamorana no tenía otra opción que presentar la dimisión.
Herrera y Valdeón en la toma de posesión de la segunda |
La dimisión era de libro y no se entiende el
motivo por el que no la anunció directamente en la rueda de prensa celebrada en
la tarde del sábado, supeditándola a un posterior encuentro personal con el
presidente de la Junta. Como
no se entendería que Valdeón intente aferrarse a su escaño de procuradora en
las Cortes Regionales, puesto que las mismas razones que han provocado su
salida de la Junta
deben conducir, si cabe con mayor motivo, a su renuncia a dicho escaño, máxime
cuando no hacerlo supondría beneficiarse del privilegio de su aforamiento
judicial para defenderse de una denuncia originada por su conducta en el ámbito
estrictamente privado. Es algo de pura coherencia.
Al inicio de un curso político que había
arrancado con un perfil extraordinariamente bajo, con una oposición resignada a
la mayoría de facto de que sigue disfrutando el PP, Juan Vicente Herrera se ha
encontrado con este serio contratiempo, que le obliga a remodelar su gobierno
en plena legislatura, algo a lo que ha sido siempre alérgico. Lo más lógico es
que dé por amortizada la vicepresidencia y se limite a nombrar una nueva
consejera o consejero de Empleo, ya que la desaparición de la consejería no
estaría bien vista por sus amigos y aliados del Dialogo Social.
De Santiago y Valdeón el sábado en la Junta |
Visto el resultado deparado por las distintas
vicepresidencias conocidas durante estos tres quinquenios de herrerato, lo más
prudente sería no proveer de nuevo el puesto. Como el rosario de la aurora
acabó el mandato de la que fuera vicepresidenta María Jesús Ruíz, hoy retirada de la política activa no sin antes
haber visto recompensada su nefasta gestión con cuatro años de plácida
descompresión ocupando un escaño autonómico en el Senado. También infelizmente retirado
está el que fuera vicepresidente segundo, amén de consejero de Economía, Tomás Villanueva, muy a su pesar en el
ojo del huracán a causa de los sucesivos escándalos -trama eólica y Perla
Negra-Polígono de Portillo- que han ido aflorando y que de hecho precipitaron
su retirada total de la escena pública. Y para confirmar el “malditismo” de las
vicepresidencias de Herrera salta ahora por los aires la de Rosa Valdeón…
Antonio Silván y Fernando Martínez Maillo |
Y en el
hipotético caso de que Rajoy fuera desalojado de La Moncloa y dejara paso en
el partido a Alberto Núñez Feijóo,
opción por la que suspira Herrera, la alternativa de Valdeón habría tenido
asimismo muy limitadas opciones. Por tres razones. La primera, por su falta de
apoyo territorial en el partido, la segunda porque su rompedora posición
mantenida en asuntos como el caso Soria y la ley del aborto le habían granjeado
no pocas enemistades en el seno del partido, y la tercera, y definitiva, porque
tengo para mí que la verdadera apuesta sucesoria del todavía inquilino del
colegio de la Asunción
no es otra que la del ex consejero de Fomento, actual alcalde de León -y no por casualidad
procurador en las Cortes- el risueño Antonio
Silván.
elblogdepedrovicente@gmail.com 11-8-2016