Tan
solo uno de los 67 escaños de las Cortes Generales elegidos en Castilla y León
(31 diputados y 36 senadores) ha cambiado de signo político este domingo con
relación al pasado 20 de diciembre. Una vez más, los sondeos electorales habían
creado falsas expectativas que las urnas se han encargado de desmentir.
El tercer diputado por Salamanca premia el repunte del PP |
Todos ellos daban por hecho el “sorpasso” en
la izquierda y ninguno preveía que el PP fuera a recuperar casi 670.000 de los votos
perdidos hace seis meses, cerca de 50.000 de ellos en Castilla y León. En el
cómputo estatal ello le ha valido al PP sumar 14 nuevos diputados, uno de los
cuales procede de esta comunidad: el conseguido contra todo pronóstico en
Salamanca a costa de Ciudadanos, partido al que por muy escaso margen ha
conseguido triplicar en número de votos en esta provincia. Con ello, el tercero
de la lista del PP salmantino, el médico Bienvenido de Arriba, se hace con el
escaño que el 20-D obtuvo el vallisoletano Pablo Yáñez.
Con una participación 2 puntos por encima de la de diciembre, el PP de Castilla y León ha incrementado su porcentaje de voto
en un 5,22 por ciento, casi un punto por encima del 4,32 registrado a nivel
nacional. Una recuperación sorprendente, ya que es netamente superior al retroceso sufrido por Ciudadanos, que en esta comunidad ha sido del
1,21 por ciento, con una pérdida de 27.738 votos.
Igea, el superviviente de C´s |
Ciudadanos es el gran perjudicado por la repetición de las
elecciones, al conservar tan solo uno de los 3 diputados conseguidos en los
anteriores comicios. Además de perder el de Salamanca, se ha quedado sin el de
León, conservando exclusivamente el que ha conseguido renovar Francisco Igea en Valladolid. Al caer
del 15,36 al 14,21 por ciento ha pasado a ser la cuarta fuerza política de la
comunidad en elecciones generales, aunque ha mantenido el tercer puesto en
Ávila, Salamanca y Segovia.
El espejismo del “sorpasso”.- Pero el
retroceso de Ciudadanos era algo previsto. Lo que no entraba en los pronósticos
era que la conjunción Podemos-IU, lejos de aglutinar los votos obtenidos por
separado el pasado mes de diciembre, fuera a empeorar los resultados alcanzados
en solitario por el partido de Pablo Iglesias. Y eso ha ocurrido
en Castilla y León, donde la nueva coalición ha sumado 223.727 votos, es decir
3.850 menos que los logrados entonces solo por Podemos. Lejos de sumar, la coalición ha restado, con
un saldo negativo que se dispara hasta los 72.666 votos teniendo en cuenta los 68.816 conseguidos hace seis meses por IU-Unidad Popular.
El fracaso del “sorpasso” ha sido por tanto total
y absoluto, frustrando las expectativas que atribuían a Unidos Podemos la posibilidad
de duplicar el número de diputados, sin descartar la consecución
de algún senador. Al final la nueva coalición se queda con los escaños del
Congreso logrados en diciembre por Valladolid (Juan Manuel del Olmo), León (Ana
Marcello) y Burgos (Miguel Vila),
todos ellos de Podemos. La única lista encabezada por IU, la de Palencia, se ha
quedado casi a 8.000 votos de conseguir el objetivo.
Repiten los tres diputados de Podemos |
En Burgos, provincia donde el 20-D la suma de
los votos de Podemos e IU superaba a los obtenidos por el PSOE, los socialistas
han mantenido la segunda posición, superando en casi 5 puntos y mas de 10.000
votos a la coalición, que ha cosechado 1.456 votos menos que los conseguidos en
diciembre por Podemos.
Mayor ha
sido aún el retroceso en León, donde Unidos Podemos ha perdido 2.615 con
respecto al anterior resultado de Podemos, volatilizándose los cerca de 14.000 votos sumados el 20-D por IU-UP. Asimismo la coalición ha empeorado el resultado en Salamanca, donde
el experimento de presentar a última hora al cunero madrileño Jorge Lago ha sido un completo fracaso,
perdiendo 720 votos en relación con el anterior resultado de Podemos. Y otro
tanto ha ocurrido en Soria y Zamora, provincia está última donde el alcalde de
la capital, Francisco Guarido, de
IU, ha pasado por completo de participar en la campaña electoral.
Tan solo en
cuatro provincias, Ávila, Palencia, Segovia y Valladolid, la coalición ha
mejorado los anteriores resultados de Podemos en solitario, aunque siempre muy
lejos de aprovechar el potencial de crecimiento que ofrecía la eventual suma de
los votos obtenidos en diciembre por IU.
Tudanca valorando anoche los resultados |
El PSOE aguanta el tipo.- Por su parte, el PSOE de Luis Tudanca ha salvado los muebles en Castilla y León,
consolidándose como segunda fuerza política y manteniendo intacta su anterior
representación parlamentaria: Nueve diputados y nueve senadores, uno por
provincia en ambas Cámaras.
Aunque ha perdido
4.806 votos en el conjunto de la comunidad, ha salido especialmente airoso en
las provincias donde tenía una situación más comprometida. En Burgos y en
Valladolid ha subido ligeramente en votos, en ambos casos presumiblemente
gracias al apoyo de antiguos votantes de IU disconformes con la coalición con
Podemos. También ha mejorado su resultado en Soria, donde no en vano gobierna la Diputación provincial.
En el resto de las provincias ha perdido votos, aunque en todas ellas mantiene un amplio margen sobre la tercera fuerza política. En porcentaje de voto, el PSOE de Castilla y León se sitúa ligeramente por encima del obtenido pos los socialistas en el conjunto del Estado.
En el resto de las provincias ha perdido votos, aunque en todas ellas mantiene un amplio margen sobre la tercera fuerza política. En porcentaje de voto, el PSOE de Castilla y León se sitúa ligeramente por encima del obtenido pos los socialistas en el conjunto del Estado.
Respecto al
Senado, ni que decir tiene que el PP ha vuelto ha conseguir el pleno de 27 de
los 36 senadores (tres por cada provincia), acaparando así 45 de esos 67 escaños de las
Cortes Generales elegidos en Castilla y León. De la mano del Partido Popular
-el PSOE bastante ha hecho con aguantar el tirón- el bipartidismo ha recuperado parte del
terreno perdido hace seis meses.