1.- ¿No es cierto que los dos representantes socialistas en la Mesa de las Cortes, Ana Sánchez y Diego Moreno, se habían comprometido a poner sus cargos a disposición de la Ejecutiva autonómica que encabeza Carlos Martínez semanas antes de la famosa “pillada” del pasado 26 de marzo? ¿Y qué hay de cierto sobre que el portavoz del grupo parlamentario popular, Ricardo Gavilanes, sondeado entonces sobre dichos relevos, señaló que el PP se inhibiría en la votación para cubrir esas vacantes de modo que el PSOE pudiera mantener su representación?
6.- ¿Es cierto que, cuando ni siquiera han comenzado formalmente las negociaciones sobre la renovación de las denominadas
“instituciones propias de la comunidad”, el PP ya ha vetado al incombustible José
F. Martín (Jotaefe para sus amigos) como candidato socialista
a formar parte del Consejo de Cuentas?
7.- ¿Ha renunciado definitivamente el consejero de Cultura a interponer las querellas judiciales anunciadas en su momento contra el poeta Luis García Montero, el ministro Óscar Puente y el todavía portavoz socialista en las Cortes, Luis Tudanca, a raíz de un artículo del primero que denunciaba los antiguos lazos de Gonzalo Santonja con el entorno de ETA? Tudanca le espetó el otro día en el “mausoleo” que todavía está esperando esa querella. Ya se sabe que una cosa es anunciar querellas y otra presentarlas: Santonja anunció las referidas a mediados de noviembre de 2023, encargando su elaboración jurídica al ilustre letrado burgalés Juan García-Gallardo Gil-Fournier (Ga-Ga sr.).
PERLAS DE LA FACHOSFERA PATRIA (o a ver quién la dice más gorda y/o insulta de manera más gruesa)
1.- “No hay manera de que Trump nombre a Pedrito”: “Pedrito está loquito por un mensaje de Trump poniéndole de vuelta y media, recriminándole su conducta o, simplemente, diciendo que es feo y que lo que debe hacer es besarle el culo. Pero no hay manera. Como mucho, sale su secretario de Economía diciendo que el que ahora vaya a China está cortándose el cuello. Y ni siquiera pronuncia su nombre, con ese desprecio propio de quien no te reconoce ni siquiera para insultarte. El caso es que Pedro se ha presentado en Pekin en el peor momento, como si fuera un embajador de la UE, que no lo es, y dando la impresión de que, ante una Europa unida, el hace la guerra por su cuenta. Ansia por erigirse la referencia de yo que se qué, y deseando llamar la atención del asombroso Hombre Naranja. Por ahora, sin éxito.
El Hombre Naranja es el maestro del caos, a todo esto. Del caos bastante calculado. Mientras Pedrito le ofrecía flores y reverencias a un criminal de guerra erigido en referencia de estadista -Ho Chi Minh- Trump cedía terreno táctico aunque no estratégico.
(…) Manda huevos, como dice el dicho, que haya que estar pendiente de los cambios de humor del muchacho anaranjado. Pero qué digo. Con lo que tenemos en casa no estamos en condiciones de ser exquisitos con el inquilino de la Casa Blanca, por muy cretino que nos parezca. Pedrito busca su sitio y es capaz de separarse de la conjunción europea solo por el ansia de una fotografía que le revitalice en el mercado interior, donde todo juega en su contra. Él cree que con esta crisis le ha venido Dios a ver. Solo le falta un insulto de Trump. Pero, joder, no hay manera”. Carlos Herrera, el de “Herrera en la Cope”, en el “Abc”. Tan exquisito como de costumbre.
2.- “Políticos
pluriempleados, superficiales y nerviosos”.- ”En qué se parecen Donald Trump, Marine Le Pen, Bolsonaro o Pedro Sánchez? En muchas cosas desde luego, aunque
discrepen en otras. Pero lo que más les unifica es su confrontación con los jueces
independientes que investigan y castigan sus posibles o probados delitos de corrupción (entre otros), acusando a los tribunales
de operar por razones políticas, y tratando de controlarlos mediante el
nombramiento y ascenso de sus partidarios. Divagaba
yo sobre estas nimiedades que en cierta medida inciden en la idiotez,
cuando no la desfachatez, de quienes nos gobiernan y de pronto cayeron en
mis manos, como por casualidad, dos libros firmados por un expresidente y un
exvicepresidente de gobiernos sedicentemente progresistas. Me refiero a José Luis
Rodríguez Zapatero (“La solución pacífica”) y a Pablo Iglesias (“Enemigos íntimos”). Sus obras son ejemplos sustantivos de la ausencia de
autocrítica del poder, incluso cuando ya no se ejerce.
Ninguno
tiene elegancia literaria, aunque reconozco el abrupto ingenio de Iglesias,
vencedor indudable frente al autoelogio permanente de “Bambi”, como llamó a
Zapatero otro vicepresidente socialista, este sí versado y audaz en las lides
de la cultura. Su incompetencia (la del susodicho cervatillo) le llevó a
ignorar y no combatir la crisis del 2008, arrojando al país a una situación
económica calamitosa, aunque no parece aceptar responsabilidad ninguna. Ahora pretende
aleccionarnos sobre el futuro del mundo, sin sonrojarse siquiera por su
repetida defensa del tirano de Venezuela y sin explicar si es o no remunerado
su encendido apoyo a China”. Juan Luis
Cebrián en "The Objective".
3.- “Omertá”: “A estas alturas,
después de mil y un paseíllos a los juzgados de los protagonistas del culebrón
corrupto que asuela los entornos y el lomo del sanchismo, en Ferraz se ha
impuesto una especie de omertá, una ley del silencio que alcanza a todo lo relacionado con
la trama alrededor de Ábalos, sanchista de primera hora y pieza esencial del
primer gobierno del “Asombro de Tetuán de las Victorias” (el barrio madrileño
en que creció la criatura).
(…) La ley del silencio decretada ahora por Ferraz tras lo que se conoce
del turbión de corrupción en el partido y en el Gobierno resulta sin embargo
atronadora. Más callado que en misa anda Cerdán, el sustituto de Ábalos en la
sala de maquinas el partido. Y resulta también muy elocuente del canguelo desatado
en el PSOE a que Ábalos, si le vienen aún peor dadas en los juzgados, tire de
la manta y declare “a calzón quitao” sobre lo que conocía o no Sánchez sobre
una trama que se extendía a varios ministerios a los que esta cuerda de
granujas endosaba, a precio de ostra, cada mascarilla durante la pandemia.
(…) Ábalos y Koldo tienen información privilegiada sobre el papel de la
mujer de Sánchez en, por ejemplo, el rescate de Air Europa y otros asuntos
turbios del “Begoñagate”. Ese “Hidalgo acaba de llamar porque el asunto está
jodido, muy jodido” es el hilo que condena a los hampones de trama con La
Moncloa. Vía libre, por tanto, al juez Peinado para que cite a Gómez y le haga
la permanente pese a que García Ortíz ha ordenado a los fiscales que pasen a
formar parte del equipo de abogados de Begoña. La “omertá” incluye por supuesto
la nula colaboración del sanchismo con la Justicia. Como en Sicilia”. Álvaro Martínez en el “Abc”.
4.- “Cuerpo a tierra, vienen los tuyos”: “Aprovechando el viaje de Pedro a Vietnam -donde ha doblado el espinazo en sentida ofrenda floral a su ídolo Ho Chi Minh, que algo sabía de trincheras- estos dos disidentes prefieren entregarse a sus buenas maneras y al respeto mutuo. En tiempos de odio la responsabilidad se convierte en terrorismo: Cuerpo y Bravo adquieren así la condición de agentes subversivos dedicados al sabotaje clandestino del muro sanchista. Por la tarde o por la noche, mediante discretas conversaciones telefónicas van retirando sillares hasta abrir un pequeño portillo por donde circula el oxígeno del diálogo.
(…) Yo no se como acabará esta tensa película de espionaje fronterizo. Sobre el agente Juan pesa el pánico de su partido a quedar de tontos útiles de Pedro, que engañando a tantos tantas veces ha conseguido traspasar a sus víctimas la responsabilidad de cada estafa. Sobre el agente Carlos (Cuerpo a tierra que vienen los tuyos) se ciernen el sectarismo incurable de su jefe y la verborrea letal de María Jesús Montero, que en la sesión de control disparó contra el PP y a continuación tildó de mentiroso al portavoz de Junts: como no sabe la opinión que rondará esa mañana la chola de su jefe vietnamita, opta por hacer el molinillo y soltar sopapos en todas las direcciones a la vez. Alguna dará en el blanco”. Jorge Bustos en “El Mundo”.
5.- “La doble moral se instala en la izquierda española”: “La doble moral desplegada con especial hipocresía es posiblemente la principal seña de identidad de la izquierda de hoy en día. En los seis años de gobierno de Pedro Sánchez, sus huestes se han prodigado en ejemplos de ese fariseísmo consistente en hacer lo contrario que pregonan, en ese “consejos vendo que para mí no tengo”. Sucedió con los casos de violencia machista supuestamente protagonizados por Iñigo Errejón y Juan Carlos Monedero, y convenientemente cobijados por los partidos que les cobijaban. Como es natural, las críticas hacia ellos no se oyeron en las manifestaciones teledirigidas y manipuladoras del 8-M. Ocurrió también con José Luis Ábalos, un adicto, al parecer, a la prostitución que hacía bandera contra ella cuando un medio adicto al régimen requería su opinión. Naturalmente también, el PSOE ha tratado de correr un tupido velo al respecto. Y ahora acontece con el rearme defensivo, los aranceles de Trump y la supuesta defensa de la Sanidad Pública, que no es más que una manipulación en roda regla para intentar socavar a la derecha.
(…) Otros casos de doble moral se están produciendo al hilo del temor a Rusia y de la ofensiva de Trump. La izquierda del no a la OTAN, del no a las armas y del falso pacifismo está tragando con el incremento del gasto en Defensa que Sánchez proyecta y ha comenzado a realizar mediante créditos extraordinarios. ¿Qué credibilidad tienen gente como Yolanda García, la propia Mónica García o el resto de los ministros de Sumar si ni siquiera son capaces de dar un puñetazo en la mesa del Gobierno y dimitir? Sergio Alonso en ”La Razón”.
6.- “La naturaleza del escorpión”: “Carlos Cuerpo y su interlocutor Juan Bravo habrían tardado diez minutos
en alcanzar un punto de entendimiento. Solo que ese no era el objetivo de la
operación porque el presidente no va a dejar que una legislatura cimentada
sobre la confrontación y el desencuentro desemboque en algún tipo de encuentro.
Por el contrario, se trata de lograr que los populares se sitúen a sí mismos en
fuera de juego para acusarles de connivencia con Vox contra los intereses
europeos. Y si aún así se pliegan a votar el decreto tendrán que hacer frente a
un conflicto interno, dado que muchos de sus votantes también son alérgicos a
cualquier tipo de acercamiento al Gobierno, sobre todo si no hay contrapartidas
por medio.
Ése es el gran éxito del sanchismo. Al deslegitimar y estigmatizar a la
oposición -es decir, a la alternancia- mientras blanquea a los golpistas y a
Bildu, ha conseguido crear un marco tóxico que envenena de discordia el clima
político, sustituyendo el concepto de rivales o adversarios por el de enemigos.
Un método clásico del populismo: destruir la institucionalidad democrática
hasta convertir el espacio cívico en una palestra de combate donde el simple,
mínimo diálogo, está prohibido. Va a costar mucho salir, si es salimos, de ese
escenario divisivo que se mantiene fijo incluso en los momentos más críticos.
La única esperanza, y remota, es que se acabe derrumbando bajo el peso de
quienes lo ha construido. Ignacio Camacho en el “Abc”.
7.- “¿España como problema?”.-”Por el momento, el mensaje de Bruselas es el cierre de filas. Un “más Europa” que, sin embargo, exhibe matices y dietas. Algunas muy burdas como la Hungría de Orban y la Eslovaquia de Fico. Otras menos llamativas que en la UE causan preocupación, como son las relaciones bilaterales que Sánchez está forjando con China de la mano de Zapatero, el ministro de Asuntos Exteriores Inconfesables. Con todo, la inquietud en Bruselas no se limita al PSOE: el PP también está bajo lupa de los conservadores alemanes a los que la victoria electoral de Merz les ha devuelto capacidad de mando. A la CDU les inquieta la cercanía del PP a Vox, un partido al que sitúan entre los enemigos de la democracia europea, y consideran que Feijóo debe seguir el ejemplo de Alemania, donde Merz pactó con socialistas y verdes para aislar a la putintrump AFD. PP y PSOE no deberían ignorar la preocupación de Bruselas. El rearme político y moral de la UE propiciará el pacto de la socialdemocracia con los conservadores. La “gran coalición”. Un nuevo paradigma en el que la guerra civil de PP y PSOE, apoyándose en sus satélites radicales, será una incómoda anomalía: ¿el regreso de España como problema en cada gran crisis de la UE?”. Iñaki Ellakuría en “El Mundo”.
8.- “Trump , el malo de la película”: “El “equipo internacional de opinión sincronizada” está activado -desde que ganó las elecciones presidenciales- en Trump, convertido en el chivo expiatorio de todas las culpas “habidas y por haber” en la UE. El promover una negociación con Putin para acabar con una guerra que va camino de su cuarto año en Ucrania le ha convertido para ese “equipo” en un belicista que además coloca a Europa en una situación de peligro ante su nuevo aliado Putin. Todo un relato falso de principio a fin.
(…) Hay intereses
económicos tan importantes como oscuros detrás de la etiología de esa guerra que
se encuentran en el “deep state” estadounidense, con su complejo
militar-industrial que produce la mayor proporción del armamento suministrado
al mercado mundial que necesita guerra o amenazas de ellas para mantener su
demanda. Es muy llamativo que cuando se abre una ventana a la posibilidad de
acabar con esa guerra, surge la urgente necesidad de un gran reame en la UE,
duplicando el gasto destinado a la Defensa.
(…) La culpa es de
Trump por establecer aranceles para compensar su déficit comercial, frente al
gran superávit de la UE. No es ser “trumpista” negarse a comprar el relato del
equipo internacional referido, dedicado a crear en sus “laboratorios
sincronizadores” una opinión pública -por medio de la opinión publicada- al servicio
de sus intereses”. Jorge
Fernández en ”La Razón”. Fernández, ministro del Interior durante la etapa de
gobierno de Mariano Rajoy, está imputado judicialmente por su vinculación con la llamada “policía patriótica”, una trama financiada con fondos
públicos dedicada fabricar bulos contra partidos políticos rivales, así como a eliminar pruebas sobre la financiación ilegal del PP.
9.- “La farsa del pacto de Estado”: “Solo un tipo como Sánchez tiene el cuajo de presentar una campaña con el slogan de “Nuestros valores no están en venta”. Nuestros productos, sí. Defiende lo tuyo. Compra lo nuestro”. Aivá la leche: ¡Nuestros valores no están en venta! El castizo diría aquello de hay que joderse y agarrarse para no caerse. Ojalá el sanchismo supiera vender productos con la misma eficacia con que vende sus principios, como ya ha demostrado encamándose con Podemos, entregándose a Bildu, vendiéndose a Puigdemont, pervirtiendo el Código Penal contra sus promesas, abaratando el golpismo, traficando con la amnistía contra el Estado de Derecho, incumpliendo todo lo prometido sobre la separación de poderes…. ¿A quien le extraña que su jefe de Gabinete se doctorase brillantemente en la teoría del engaño político?
(…) Perseguía la imagen de un Gobierno a la altura en un momento difícil para liderar un diálogo de Estado evitando la confrontación. Pero, ay, el cinismo le ha durado apenas dos telediarios. Y no ya por dejar de lado al PP en el BOE, como era previsible en el escorpión de la fábula, sino por el enésimo trato encubierto de privilegios para Cataluña con un 25 por ciento de las ayudas reservadas a costa de los demás territorios. Menas, no, fondos sí. Y todo esto bajo el eslogan “Nuestros valores no están en venta…” No puede haber ningún pacto de Estado, en realidad ninguna política de Estado, en alguien que no respeta al Estado. Y es lo que hay”. Teodoro León Gross en el “Abc”.
10.- “Admirada Lola Herrera, por esto votan las mujeres a Vox”: Decía mi admirada Herrera que le «interesaba hablar de la vejez desde el teatro porque somos unos marginados los viejos». Un mensaje universal, interesante, acertado y profundo. Pero era imposible que se quedara ahí. Como muchos de sus compañeros, tenía que demostrar su progresismo impostado y su intolerancia con los que no tienen su pensamiento único. Y profirió una pregunta retórica: «¿Por qué votan a Vox las mujeres? Votan contra ellas mismas, contra sus propios derechos».
(…) Nunca he entendido qué mecanismo mental les hace a ciertos personajes del espectáculo creer que a los demás nos interesa lo que piensen o que pueden verter su bilis sobre potenciales clientes de su arte. Almodóvar, Bardem, Víctor Manuel, Toledo o Tosar son maestros en la materia. Pero ser una actriz sublime, como Lola Herrera, no le da derecho a sentar cátedra con media docena de clichés comunistas a insultar a media España que ha archidemostrado en las elecciones que no traga el hipócrita discurso pijoprogresista.
Defienda el teatro doña Lola, a los mayores, a su soledad no deseada y a esa formidable profesión que consiste en olvidarse del ser íntimo para asumir la vida de otros y emocionar al mundo. En eso usted es una reina. No lo estropee. No quiera verse frente a un Mario de pensamiento distinto arengando sobre el mismo ataúd”. Maite Alcaraz en “El Debate”. Ahora resulta que el feminismo de Lola Herrera responde a "un progresismo impostado", se basa en "clichés comunistas" y reproduce el "hipócrita discurso pijoprogresista"... Pues nada Mayte, ánimo en tu afán de analizar vertidos de bilis...