lunes, 26 de abril de 2021

Ruptura sin precedentes

Atrás ha quedado la fiesta oficial de Castilla y León, que este año ha servido para visualizar la ruptura política entre el primer partido de la oposición -no se olvide que también el más votado en las elecciones autonómicas y el que cuenta con mayor número de procuradores en las Cortes- y el bloque PP-Ciudadanos que detenta el poder en la Junta y ostenta la mayoría en la Mesa de la Cámara (que no en el pleno de la Cámara, donde ha quedado en minoría).

Luis Fuentes y Alfonso Fernández Mañueco (Foto Abc)

 Por primera vez, los socialistas han pasado de la entrega de los Premios Castilla y León, el principal acto institucional que celebra la Junta en el marco de la fiesta del 23 de abril. Y tampoco asistían a la inauguración oficial de la exposición “Comuneros. 500 años”, organizada por las Cortes dentro de los actos conmemorativos del V Centenario de la Batalla de Villalar. 

En el álbum fotográfico de esos eventos, así como en el de los celebrados el mismo 23 de abril en la villa comunera, no existe imagen en la que aparezca el líder autonómico del PSOE, Luis Tudanca, junto al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y el de las Cortes, Luis Fuentes. (Este último, tras borrar el nombre de Villalar de la Fundación patrocinada por las Cortes y cuestionar la fecha del 23 de abril como fiesta oficial de Castilla y León, se ha caído del caballo y con motivo del V Centenario antes aludido ha devenido en entusiasta defensor del símbolo y seña de identidad que el mismo denostó nada más llegar al cargo. Vivir para ver).

  La pérdida de la mayoría absoluta que sumaban PP y C´s, ha espoleado a los socialistas, que tratan de aprovechar la coyuntura antes de que el bloque de gobierno consiga restablecer su hegemonía parlamentaria. Tras anotarse en su casillero la apresurada derogación del “decretazo sanitario”, el PSOE se apresta a solicitar de nuevo la comisión de investigación sobre el Covid y las residencias de ancianos, vetada el pasado diciembre por los partidos que sustentan el gobierno Mañueco. 

María Montero, la procuradora no adscrita

 Dicha comisión va a salir ahora adelante, ya que ningún procurador del grupo mixto está dispuesto a secundar el veto de PP y C-s, y tampoco la procuradora no adscrita, María Montero, que está siendo vilipendiada por sus antiguos compañeros de grupo. Cuestión distinta es que, una vez creada la comisión, los dos partidos de gobierno se dediquen a torpedearla y, si pueden, a bloquearla, como hizo el PP en la pasada legislatura con la constituida en torno a la “Perla Negra” y demás turbiedades localizadas en la antigua consejería de Economía.

 Esto ocurre mientras el acuerdo entre la Junta y el partido “Por Ávila”, por el que el procurador Pedro Pascual aportaría el voto necesario para restablecer la mayoría absoluta, se está demorando más de lo previsto a causa de dos escollos. El primero es que la formación abulense exige que se expliciten públicamente las contrapartidas obtenidas para la provincia de Ávila a cambio de su apoyo, aspecto problemático para el PP, temeroso de que ello sea visto como un agravio en las demás provincias. El otro escollo es que la presencia del líder de “Por Ávila” y alcalde de la capital, , Jesús Manuel Sánchez Cabrera, en la foto de la firma de ese acuerdo levanta ronchas en Génova, donde consideran que ello constituiría una claudicación ante quien desafió, y con evidente éxito, la suprema autoridad de Pablo Casado

Tudanca con los agentes del Diálogo Social

 Entretanto, el vicepresidente Igea sigue haciendo de las suyas, poniendo palos en las ruedas en la negociación de los acuerdos del Diálogo Social, donde está bloqueado el nuevo Plan de Empleo ante la negativa de la Junta a implementar nuevas ayudas complementarias a los trabajadores en ERTE. Paralelamente, el acuerdo unilateral firmado con el sindicato de Enfermería SATSE se está volviendo como un bumerán contra el gobierno Mañueco. Con él consiguió quebrar la unidad del frente sindical de los sanitarios, pero ha sido a costa de indignar no solo al resto de los sindicatos de la Sanidad, sino también a los del sector educativo y a otros colectivos de la Función Pública, todos los cuales se consideran discriminados en relación con los profesionales de Enfermería.

 Para compensar tanta adversidad, PP y Ciudadanos se van a dar el gustazo de aprobar esta semana en las Cortes la bonificación al 99 por ciento del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, medida para la que sí cuentan con el apoyo de “Por Ávila” y Vox. Una victoria pírrica que les reconcilia con los grandes patrimonios familiares, los verdaderos beneficiados de un “regalo fiscal” que diezma aún más las exhaustas arcas de la comunidad. 

(Publicado en elDiario.es Castilla y León)