Discrepo, como no podía ser de otra forma, de
determinado juntaletras muy venido a menos (casi tanto como el medio en el que
vierte sus vanilocuencias, que por cierto no es la cabecera de prensa más
antigua de España, título acreditado por "El Faro de Vigo") que encuentra aburrido
el panorama político que vivimos en Castilla y León.
Por el
contrario, yo lo encuentro de lo más animado. En la Junta, en las Cortes, en la
oposición, en el mundo agrario y en los medios de comunicación, donde, antes de que Pedro Sánchez sacara a colación la
palabreja, ya me ocupé aquí de señalar como campa por sus respetos la
“fachosfera” regional. Ayer mismo tuvimos ocasión de desayunarnos con titulares
en primera página del siguiente tenor: “Puigdemont
ridiculiza al PSOE en el Congreso y obliga a que Sánchez se envaine la
amnistía”. (A propósito y para tranquilidad de alguno que se asombra de que se
le vincule a la “fachosfera”: Los 13 diputados socialistas por Castilla y León,
los trece, llamados por su nombre y apellidos, cometieron el pasado martes la infamia de votar de viva voz a favor de la amnistía
y, hasta dónde se sabe, han podido regresar a sus domicilios sin que ningún
convecino les haya increpado por el camino).
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| José A. de Santiago-Juárez y Luis Miguel González Gago |
En fin, uno creía superada la insufrible etapa
marcada por las ocurrencias del que fuera vicepresidente, consejero y portavoz
de los últimos gobiernos de Juan Vicente
Herrera, el decrépito Joseantonio de
Santiago-Juárez, conocido como “El
Pica”, cuando de repente aparece en escena la llamada Comisión de Ética
Pública de Castilla y León, uno de esos inventos paridos por la “factoría
de ficción” montada por la mano que mecía la cuna presidencial. Otros, como
aquel ocurrente “Banco de pensadores”, desaparecieron sin levantar acta de defunción.
Pensarán que va de coña, pero el susodicho llegó a crear un órgano denominado “Guardián
de la Marca”, teóricamente dedicado a proteger el “burruño”, como era conocida
su representación gráfica. Para mayor escarnio, se descubrió que el slogan “Tus ideas cobran vida” venía siendo
utilizado con anterioridad por el centro comercial “A Laxe”, situado en el puerto de Vigo.
Pero a lo que iba. Resulta que el órgano encargado de velar por el cumplimiento del Código Ético y de Austeridad de los Altos Cargos de la Comunidad Autónoma lo preside el consejero de la Presidencia, actualmente el connotado jurista (me ahorro detallar el sesgo de la connotación), Luis Miguel González Gago, el mismo que cuando renunció a la dirección general que ocupaba a las órdenes del consejero De Santiago-Juárez, se encontró con que "El Pica" aceptó dicha renuncia dejando constancia pública de que no se le agradecían los servicios prestados.
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| Pedro Tomás Nevado-Batalla y José A. Monago |
De tal forma
que la Comisión, reunida entre las 13:30 y las 14:45 horas del pasado lunes 29
de enero en la consejería de Presidencia, acordó, seguro que tras acaloradas
deliberaciones, archivar por unanimidad las denuncias formuladas por el
procurador Francisco Igea sobre los comportamientos
presuntamente xenófobos y antidemocráticos en los que habrían incurrido el
vicepresidente de la Junta, Juan
García-Gallardo, y el consejero de Empleo, Mariano Veganzones, por la participación del primero en la
concentración celebrada contra la llegada de “menas” (menores extranjeros no
acompañados) al balneario de Medina del Campo y de ambos en las concentraciones
ante la sede del PSOE de Valladolid.
Los cinco comisionados (además de los tres mencionados, la catedrática de Derecho Civil de la UBU María Elena Domingo y el catedrático de Derecho Penal de la ULE Miguel Díaz y García-Conlledo), tras exonerar a Gallardo y a Veganzones de cualquier actuación reprobable, se fueron a comer tan oreados, desconozco si juntos o por separado. Tienen que criar pelo las ranas para que dicha Comisión admita que el presidente, el vicepresidente o un consejero de la Junta ha vulnerado el Código Ético. Es como encomendar al lobo el cuidado de las gallinas. (Por cierto que, tras determinado encuentro casual en Madrid, a “Luismi” se le están torciendo sus planes iniciales sobre la modificación de la Ley regional de Juegos y Apuestas, pero de eso ya hablaremos en otra ocasión).
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| Irene Montero y Pablo Fernández el martes en Valladolid |
Si Igea
se empeña en causas imposibles, desafiando la máxima orteguiana según la cual “todo esfuerzo inútil conduce a la
melancolía”, a su compañero de fatigas en el grupo mixto de las Cortes, Pablo Fernández, no se le pone nada
por delante y lleva camino de emular el milagro de la bilocación de María Jesús de Agreda (nada que ver con
la ex vicepresidenta de la Junta, que era tocaya y del mismo pueblo, a la vez que la gobernante más cerril que ha conocido esta sufrida comunidad autónoma). Por si no bastara compatibilizar su condición de coordinador autonómico de Podemos y de procurador de las Cortes con la coportavocía estatal del partido, Fernández
acaba de asumir la Secretaria nacional de Organización y se perfila como número
tres de la candidatura al Parlamento Europeo que encabezará la ex ministra Irene Montero.
La realidad es que Pablo, que en Castilla y León ha dejado Podemos como un solar, está como loco por encontrar en Madrid un puesto que le permita continuar viviendo de la política. Y su propósito fuguista no es de ahora. Ya con ocasión de las elecciones autonómicas adelantadas por Isabel Díaz Ayuso en 2021 intentó colocarse en la lista de Podemos a la Asamblea madrileña, ello cuando había transcurrido poco más de un mes desde su reelección como coordinador autonómico. Cualquier cosa antes que tener que volver a vender chuches.
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| José Antonio Rubio Mielgo |
Mientras, agricultores y ganaderos se echan a la calle en varias provincias de forma "espontánea" convocados un tanto sospechosamente a través de whatsapps y al margen de las OPAS. Una movilización con un tufo a "fachosfera" que tira para atrás casi tanto como el vertido incontrolado de un tanque de purines. Ello ante el significativo silencio del consejero de Agricultura, Gerardo Dueñas (Vox), cuyo jefe, el vicepresidente Gallardo, que no tiene entre sus competencias las relaciones internacionales de la Junta, se ha montado un viaje presuntamente institucional a la Hungría de Víctor Orban, el afín del que se vale el autócrata Vladimir Putin para socavar los cimientos de la Unión Europea.
Y por si fuera poco, el presidente accidental del Consejo General del Poder Judicial, Vicente Guilarte, que lleva tiempo desmarcándose de la estrategia del PP, va y advierte que, de fracasar el intento auspiciado por el comisario europeo Reynders de renovar el órgano rector de la Judicatura, toma las de Villadiego y regresa a su puesto de catedrático de Derecho Civil en la Universidad de Valladolid. Ay Felisa, que me da la risa...