lunes, 14 de julio de 2014

Patada a López en el trasero de Sánchez

 Los socialistas de Castilla y León no han estado en sintonía con el conjunto de la militancia del partido a la hora de elegir al nuevo líder del PSOE. Contra todo pronóstico, han sido más, cerca del 46 por ciento, los que decidieron apostar por Eduardo Madina en lugar de hacerlo por Pedro Sánchez, que en esta comunidad no ha llegado al 40 por ciento.


Óscar López y Pero Sánchez en una imagen de archivo
Contra pronóstico a tenor de la batalla previa de los avales, que la había ganado Sánchez (2.026) con cierto margen sobre Madina (1.787) , si bien dicha diferencia se localizaba por completo en la provincia de León, donde el diputado madrileño había recogido 343 más que el vasco. Pero una cosa eran los avales previos a cada candidato y otra la votación en las urnas dispuestas el pasado domingo en las sedes del partido. Y en dos de las nueve provincias de esta comunidad el voto ha ido por otro lado.

El secretario provincial del PSOE de León, Tino Rodriguez, todavía no ha salido de su asombro al comprobar que la militancia leonesa, aunque sea por escaso margen, ha votado más a Madina que a Sánchez. La sorpresa ha sido ciertamente mayúscula, aunque no la única. También la ha habido en Soria, donde el diputado vasco, que no había conseguido un solo aval, a la postre ha resultado ser el más votado, seguido en este caso de José Antonio Pérez Tapias. Y bastante mas abultada de lo previsto ha sido su victoria en Valladolid, donde ha superado al madrileño nada menos que por 24 puntos. Con ello han sido seis las provincias (además de las tres citadas, Palencia, Salamanca y Burgos) que han preferido a Madina frente a Sánchez, quien únicamente se ha impuesto en Zamora, Ávila y Segovia.

Eduardo Madina y Julio Villarrubia
 Habida cuenta de que los leales al depuesto secretario autonómico, Julio Villarrubia, se habían alineado abiertamente con el diputado vasco, mientras los afines al secretario federal de Organización, Óscar López, han apoyado sin reservas al madrileño, la conclusión es que en Castilla y León los derrotados han sido los ganadores y viceversa.
El candidato que ha patrocinado no liderará el partido, pero Villarrubia ha ganado claramente el pulso librado con López de cara al congreso autonómico extraordinario a celebrar después del verano, en el que, no olvidemos, se elegirá al nuevo líder del partido en Castilla y León igualmente mediante el voto directo de la militancia.

 López podrá decir que él se ha mantenido al margen de la disputa entre Sánchez y Madina, sin haberse decantado públicamente por ninguno de ellos. Pero lo que no podrá negar es que todos sus afines se han movilizado todo lo que han podido y más en apoyo del que ya es virtual secretario general del PSOE. Me atrevería a decir que Madina no hubiera sido el candidato más votado en Castilla y León si no fuera porque una parte de la militancia ha decidido propinar a López una patada en el trasero de Sánchez. La voladura de la ejecutiva autonómica efectuada el pasado 30 de mayo había sido interpretada por muchos como una descarada maniobra personal para recuperar el control del partido. Y ello le ha pasado factura al todavía secretario federal de Organización (que dejará de serlo a finales de mes).

Soraya Rodriguez y Alfredo Pérez Rubalcaba
 López dispondrá a buen seguro del apoyo del nuevo equipo que forme Sánchez en Ferraz, pero ello no le garantiza en absoluto ni reconquistar la secretaría autonómica del partido ni volver a ser el candidato socialista a la presidencia de la Junta, asuntos ambos a dirimir mediante el voto de toda la militancia. Vistos los resultados del domingo, intentarlo sería por su parte una temeridad. Lo que en ningún caso quiere decir que Villarrubia tenga por delante un camino triunfal.

 El nuevo escenario se presta, incluso más que antes, a la irrupción de una “tercera vía” lo menos contaminada posible que obre el milagro de la integración de las dos facciones en liza. Un papel que, según apuntó días atrás “El topillo”, podía intentar jugar la diputada vallisoletana y portavoz socialista en el Congreso, Soraya Rodriguez. Y no conviene tampoco perder de vista el papel de Izquierda Socialista, cuyo candidato ha sido el segundo más votado el pasado domingo en dos provincias (Soria y Zamora), obteniendo casi el 15 por ciento de los votos. Si se consolida como corriente organizada en las nueve provincias, IS puede erigirse incluso en el árbitro de la contienda.