lunes, 27 de junio de 2016

Inesperado repunte del PP y fracaso absoluto del "sorpasso"

  Tan solo uno de los 67 escaños de las Cortes Generales elegidos en Castilla y León (31 diputados y 36 senadores) ha cambiado de signo político este domingo con relación al pasado 20 de diciembre. Una vez más, los sondeos electorales habían creado falsas expectativas que las urnas se han encargado de desmentir.


El tercer diputado por Salamanca premia el repunte del PP
 Todos ellos daban por hecho el “sorpasso” en la izquierda y ninguno preveía que el PP fuera a recuperar casi 670.000 de los votos perdidos hace seis meses, cerca de 50.000 de ellos en Castilla y León. En el cómputo estatal ello le ha valido al PP sumar 14 nuevos diputados, uno de los cuales procede de esta comunidad: el conseguido contra todo pronóstico en Salamanca a costa de Ciudadanos, partido al que por muy escaso margen ha conseguido triplicar en número de votos en esta provincia. Con ello, el tercero de la lista del PP salmantino, el médico Bienvenido de Arriba, se hace con el escaño que el 20-D obtuvo el vallisoletano Pablo Yáñez.

  Con una participación 2 puntos por encima de la de diciembre, el PP de Castilla y León ha incrementado su porcentaje de voto en un 5,22 por ciento, casi un punto por encima del 4,32 registrado a nivel nacional. Una recuperación sorprendente, ya que es netamente superior al retroceso sufrido por Ciudadanos, que en esta comunidad ha sido del 1,21 por ciento, con una pérdida de 27.738 votos.

Igea, el superviviente de C´s
 Ciudadanos es el gran perjudicado por la repetición de las elecciones, al conservar tan solo uno de los 3 diputados conseguidos en los anteriores comicios. Además de perder el de Salamanca, se ha quedado sin el de León, conservando exclusivamente el que ha conseguido renovar Francisco Igea en Valladolid. Al caer del 15,36 al 14,21 por ciento ha pasado a ser la cuarta fuerza política de la comunidad en elecciones generales, aunque ha mantenido el tercer puesto en Ávila, Salamanca y Segovia.

El espejismo del “sorpasso”.-  Pero el retroceso de Ciudadanos era algo previsto. Lo que no entraba en los pronósticos era que la conjunción Podemos-IU, lejos de aglutinar los votos obtenidos por separado el pasado mes de diciembre, fuera a empeorar los resultados alcanzados en solitario por el partido de Pablo Iglesias. Y eso ha ocurrido en Castilla y León, donde la nueva coalición ha sumado 223.727 votos, es decir 3.850 menos que los logrados entonces solo por Podemos.  Lejos de sumar, la coalición ha restado, con un saldo negativo que se dispara hasta los 72.666 votos teniendo en cuenta los 68.816 conseguidos hace seis meses por IU-Unidad Popular.

 El fracaso del “sorpasso” ha sido por tanto total y absoluto, frustrando las expectativas que atribuían a Unidos Podemos la posibilidad de duplicar el número de diputados, sin descartar la consecución de algún senador. Al final la nueva coalición se queda con los escaños del Congreso logrados en diciembre por Valladolid (Juan Manuel del Olmo), León (Ana Marcello) y Burgos (Miguel Vila), todos ellos de Podemos. La única lista encabezada por IU, la de Palencia, se ha quedado casi a 8.000 votos de conseguir el objetivo.

Repiten los tres diputados de Podemos
 En Burgos, provincia donde el 20-D la suma de los votos de Podemos e IU superaba a los obtenidos por el PSOE, los socialistas han mantenido la segunda posición, superando en casi 5 puntos y mas de 10.000 votos a la coalición, que ha cosechado 1.456 votos menos que los conseguidos en diciembre por Podemos.

Mayor ha sido aún el retroceso en León, donde Unidos Podemos ha perdido 2.615 con respecto al anterior resultado de Podemos, volatilizándose  los cerca de 14.000 votos sumados el 20-D por IU-UP. Asimismo la coalición ha empeorado el resultado en Salamanca, donde el experimento de presentar a última hora al cunero madrileño Jorge Lago ha sido un completo fracaso, perdiendo 720 votos en relación con el anterior resultado de Podemos. Y otro tanto ha ocurrido en Soria y Zamora, provincia está última donde el alcalde de la capital, Francisco Guarido, de IU, ha pasado por completo de participar en la campaña electoral.

Tan solo en cuatro provincias, Ávila, Palencia, Segovia y Valladolid, la coalición ha mejorado los anteriores resultados de Podemos en solitario, aunque siempre muy lejos de aprovechar el potencial de crecimiento que ofrecía la eventual suma de los votos obtenidos en diciembre por IU.

Tudanca valorando anoche los resultados
El PSOE aguanta el tipo.-  Por su parte, el PSOE de Luis Tudanca ha salvado los muebles en Castilla y León, consolidándose como segunda fuerza política y manteniendo intacta su anterior representación parlamentaria: Nueve diputados y nueve senadores, uno por provincia en ambas Cámaras.

Aunque ha perdido 4.806 votos en el conjunto de la comunidad, ha salido especialmente airoso en las provincias donde tenía una situación más comprometida. En Burgos y en Valladolid ha subido ligeramente en votos, en ambos casos presumiblemente gracias al apoyo de antiguos votantes de IU disconformes con la coalición con Podemos. También ha mejorado su resultado en Soria, donde no en vano gobierna la Diputación provincial. 
En el resto de las provincias ha perdido votos, aunque en todas ellas mantiene un amplio margen sobre la tercera fuerza política. En porcentaje de voto, el PSOE de Castilla y León se sitúa ligeramente por encima del obtenido pos los socialistas en el conjunto del Estado.

Respecto al Senado, ni que decir tiene que el PP ha vuelto ha conseguir el pleno de 27 de los 36 senadores (tres por cada provincia), acaparando así 45 de esos 67 escaños de las Cortes Generales elegidos en Castilla y León. De la mano del Partido Popular -el PSOE bastante ha hecho con aguantar el tirón- el bipartidismo ha recuperado parte del terreno perdido hace seis meses.