Superada la borrasca, mucho menos intensa de
lo esperado, de la concentración rojigualda de la plaza de Colón, la
ciclogénesis explosiva instalada sobre la política española continúa a partir
de mañana con el juicio abierto a los dirigentes del “procés” catalán que no
quisieron o pudieron poner tierra por medio para eludir al implacable juez Llarena.
Una vista oral que excitará aún más las bajas pasiones que vienen crispando el escenario político, máxime cuando uno de los letrados de la acusación particular no será otro que Javier “Rambo” García Smith, el número dos de Vox, el partido ultra que, antes de disponer de representación parlamentaria nacional, viene marcando la pauta tanto al PP como a Ciudadanos, los socios de gobierno a los que franqueado la toma dela Junta de Andalucía.
Una vista oral que excitará aún más las bajas pasiones que vienen crispando el escenario político, máxime cuando uno de los letrados de la acusación particular no será otro que Javier “Rambo” García Smith, el número dos de Vox, el partido ultra que, antes de disponer de representación parlamentaria nacional, viene marcando la pauta tanto al PP como a Ciudadanos, los socios de gobierno a los que franqueado la toma de
Concentración en la plaza de Colón |
Pese a venir instrumentando, con la complicidad filial, el legado político de Adolfo Suárez, el líder del PP aspira a que esa figurada moción tenga efectos similares a la presentada en 1980 por Felipe González contra el gobierno de UCD, tras la cual el partido gubernamental ya no levantó cabeza, sirviendo en bandeja la arrolladora victoria electoral socialista en las históricas elecciones generales de 1982. Pero también forma parte de
El calendario propicia que la actual efervescencia
política, lejos de remitir, vaya a ir in crescendo hasta el 26-M. Ello con un
grado de volatilidad política que hace que los sondeos realizados en enero
estén desfasados en febrero, que los que se están haciendo ahora vayan a ser corregidos por los que se publiquen en marzo y así hasta la última semana de campaña, en la
que tendremos que volver a recurrir a “El Periódico de Andorra” para ver como
se llega a la jornada electoral.
En esta coyuntura hacer porras sobre
eventuales resultados electorales resulta tan aleatorio como jugar a la
bonoloto. Convertidas en fosfatina las mayorías absolutas, resultan muy arriesgadas
las cábalas sobre lo que puede suceder en esta o aquella comunidad autónoma, en
cualquier ayuntamiento de cierta entidad y no digamos en las Diputaciones,
donde hay que hacer las cuentas conforme a los compartimentados partidos judiciales
de cada provincia.
Luis Tudanca y Alfonso Fernández Mañueco |
Vistas las reticencias del partido naranja a encamarse con el de Santiago Abascal, y excluyendo por tanto un pacto pleno entre las tres opciones que articulan la actual derecha patria, yo no descartaría que en una comunidad tan conservadora como ésta el PP y Vox se basten y se sobren por sí mismos para sumar los 41 escaños que marcan la mayoría absoluta del próximo Parlamento de Castilla y León. Pero tampoco puede descartarse que sean PSOE y Ciudadanos los que sumen ese número de procuradores.
Visto lo cual, puede estar en el filo de
un escaño de las Cotes que el actual gobierno zombi de Juan
Vicente Herrera ceda el testigo a otro de una coalición PP-Vox presidido
por Alfonso Fernández Mañueco o, en
su lugar, al que podrían conformar PSOE y Ciudadanos con el socialista Luis Tudanca a la cabeza. Y no me
negarán que entre ambas alternativas no hay una sustancial diferencia, por mas que
el líder de Podemos, Pablo Fernández, consideré que Tudanca no
sería el cambio, sino el “recambio” del declinante gobierno autonómico del PP.
Pero al margen de Podemos e IU, que, juntos o
por separado, están condenados a favorecer sí o sí esa hipotética alternancia,
el papel de otras minorías puede ser decisivo para decantar la balanza si
ninguno de los dos binomios antes señalados alcanza la mayoría requerida para
investir al nuevo presidente de la
Junta.
José Antonio de Miguel, lider de la PPSO |
Y
esto mismo puede extenderse al partido “Por Ávila” en el que, de no dar un
vuelco las cosas, desembarcará el actual presidente de la Diputación abulense, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, en rebeldía tras su frustrado intento de asumir la
candidatura del PP a la alcaldía de la capital. (La represalia adoptada contra
él por Casado a instancias del influyente tándem constituido por los senadores Sebastián González y Miguel Ángel García Nieto puede acabar
saliéndole muy caro al PP abulense e incluso también al de Castilla y León).
Y todavía más: En función de cómo se conformen las candidaturas autonómicas del partido, tampoco sería de extrañar que en alguna otra provincia alguien que se sienta marginado por la dirección del partido decida marcarse otro “sanchezcabrera” o similar, complicando aún más las opciones de Fernández Mañueco.
Y todavía más: En función de cómo se conformen las candidaturas autonómicas del partido, tampoco sería de extrañar que en alguna otra provincia alguien que se sienta marginado por la dirección del partido decida marcarse otro “sanchezcabrera” o similar, complicando aún más las opciones de Fernández Mañueco.
Habida cuenta de que ese mismo fraccionamiento
político será incluso mayor en alguno de los principales ayuntamientos, así como en las Diputaciones provinciales, es muy posible que nos acostemos el 26 de
mayo sin saber quien va a gobernar en la Junta , quien va a ser el alcalde aquí, allá o
acullá y quien va a presidir esta o aquella Diputación. Y habrá casos en los
que la incertidumbre se prolongue hasta el mismo día en el que se constituyan las
nuevas instituciones electas el 26-M. Al tiempo.