Atrás ha quedado la fiesta oficial de Castilla y León, que este año ha servido para visualizar la ruptura política entre el primer partido de la oposición -no se olvide que también el más votado en las elecciones autonómicas y el que cuenta con mayor número de procuradores en las Cortes- y el bloque PP-Ciudadanos que detenta el poder en la Junta y ostenta la mayoría en la Mesa de la Cámara (que no en el pleno de la Cámara, donde ha quedado en minoría).
Luis Fuentes y Alfonso Fernández Mañueco (Foto Abc)
Por primera vez, los socialistas han pasado de la entrega de los Premios Castilla y León, el principal acto institucional que celebra la Junta en el marco de la fiesta del 23 de abril. Y tampoco asistían a la inauguración oficial de la exposición “Comuneros. 500 años”, organizada por las Cortes dentro de los actos conmemorativos del V Centenario de la Batalla de Villalar.
En el álbum fotográfico de esos eventos, así
como en el de los celebrados el mismo 23 de abril en la villa comunera, no
existe imagen en la que aparezca el líder autonómico del PSOE, Luis Tudanca, junto al presidente de la
Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y
el de las Cortes, Luis Fuentes.
(Este último, tras borrar el nombre de Villalar de la Fundación patrocinada por
las Cortes y cuestionar la fecha del 23 de abril como fiesta oficial de
Castilla y León, se ha caído del caballo y con motivo del V Centenario antes
aludido ha devenido en entusiasta defensor del símbolo y seña de identidad que
el mismo denostó nada más llegar al cargo. Vivir para ver).
La
pérdida de la mayoría absoluta que sumaban PP y C´s, ha espoleado a los
socialistas, que tratan de aprovechar la coyuntura antes de que el bloque de
gobierno consiga restablecer su hegemonía parlamentaria. Tras anotarse en su
casillero la apresurada derogación del “decretazo sanitario”, el PSOE se
apresta a solicitar de nuevo la comisión de investigación sobre el Covid y las
residencias de ancianos, vetada el pasado diciembre por los partidos que
sustentan el gobierno Mañueco.
María Montero, la procuradora no adscrita |
Dicha comisión va a salir ahora adelante, ya
que ningún procurador del grupo mixto está dispuesto a secundar el veto de PP y
C-s, y tampoco la procuradora no adscrita, María
Montero, que está siendo vilipendiada por sus antiguos compañeros de grupo.
Cuestión distinta es que, una vez creada la comisión, los dos partidos de
gobierno se dediquen a torpedearla y, si pueden, a bloquearla, como hizo el PP
en la pasada legislatura con la constituida en torno a la “Perla Negra” y demás
turbiedades localizadas en la antigua consejería de Economía.
Esto
ocurre mientras el acuerdo entre la Junta y el partido “Por Ávila”, por el que
el procurador Pedro Pascual aportaría
el voto necesario para restablecer la mayoría absoluta, se está demorando más
de lo previsto a causa de dos escollos. El primero es que la formación abulense
exige que se expliciten públicamente las contrapartidas obtenidas para la
provincia de Ávila a cambio de su apoyo, aspecto problemático para el PP, temeroso
de que ello sea visto como un agravio en las demás provincias. El otro escollo
es que la presencia del líder de “Por Ávila” y alcalde de la capital, , Jesús Manuel Sánchez Cabrera, en la
foto de la firma de ese acuerdo levanta ronchas en Génova, donde consideran que
ello constituiría una claudicación ante quien desafió, y con evidente éxito, la
suprema autoridad de Pablo Casado.
Tudanca con los agentes del Diálogo Social |
Entretanto, el vicepresidente Igea sigue
haciendo de las suyas, poniendo palos en las ruedas en la negociación de los
acuerdos del Diálogo Social, donde está bloqueado el nuevo Plan de Empleo ante
la negativa de la Junta a implementar nuevas ayudas complementarias a los
trabajadores en ERTE. Paralelamente, el acuerdo unilateral firmado con el
sindicato de Enfermería SATSE se está volviendo como un bumerán contra el
gobierno Mañueco. Con él consiguió quebrar la unidad del frente sindical de los
sanitarios, pero ha sido a costa de indignar no solo al resto de los sindicatos
de la Sanidad, sino también a los del sector educativo y a otros colectivos de
la Función Pública, todos los cuales se consideran discriminados en relación
con los profesionales de Enfermería.
Para compensar tanta adversidad, PP y Ciudadanos se van a dar el gustazo de aprobar esta semana en las Cortes la bonificación al 99 por ciento del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, medida para la que sí cuentan con el apoyo de “Por Ávila” y Vox. Una victoria pírrica que les reconcilia con los grandes patrimonios familiares, los verdaderos beneficiados de un “regalo fiscal” que diezma aún más las exhaustas arcas de la comunidad.
(Publicado en elDiario.es Castilla y León)