Ya sabemos, a grandes trazos, a qué piensa dedicar la Junta el suplemento presupuestario del que va a dotarse en este último trimestre del año aprovechando el nuevo límite de déficit (1,27 por ciento en lugar el 0,7 inicialmente previsto) asignado el pasado verano a Castilla y León. Lo adelantaba el otro día Juan Vicente Herrera en las Cortes, recalcando que dicho fondo extra (277,8 millones de euros) va a destinarse en su totalidad a los servicios esenciales que presta la comunidad. Y, a la espera de que se presente en próximos días el proyecto de ley que dará cobertura a ese crédito extraordinario, en principio no vamos a poner en duda que dichos dineros van a servir para paliar algunos de los estragos causados por los tres años consecutivos de drásticos recortes presupuestarios.
Herrera: Cuentas y cuentos |
Hasta ahí
estaríamos de acuerdo. Por lo que no pasamos es porque el aparato
propagandístico de la Junta
y su agradecido coro mediático quiera hacernos creer que con está inyección de
277,8 millones de euros se corrigen de un plumazo todos los desperfectos
ocasionados por tres años de sucesivos recortes, algo así como si fueramos a recuperar de golpe todo lo
que se ha quedado por el camino en el trienio negro de la crisis en Castilla y
León. Ha de recordarse que en estos tres años el llamado “gasto social”
(consejerías de Sanidad, Educación y Familia) se ha visto reducido en 756
millones de euros (422 en Educación, 271 en Sanidad y 63 en Familia).
El año de mayor recorte había sido el actual,
en el que el Presupuesto de las citadas consejerías descendió en 341 millones, llevándose
la palma la de Sanidad (-183) por delante de la Educación (-150). Por lo
tanto, teniendo en cuenta que 83 de los 277,8 millones se destinan a la
consejería de Fomento y otros 10
a otro miniplan de empleo, el “gasto social” tan solo va a
recuperar 183 de esos 341 millones perdidos en el presente ejercicio. O lo que
es lo mismo, poco mas de una cuarta parte de todo lo recortado desde
2011.
Si además se tiene en cuenta que en 2014 el límite
de déficit retrocede al 1 por ciento y que este suplemento presupuestario no
podrá consolidarse, estos 277,8 millones
han de tomarse como lo que son, un parche para reparar algunos -que no todos,
ni mucho menos- de esos estragos sociales ocasionados por las sucesivas oleadas
de recortes. Buena parte del parcheado (100 millones) se producirá en la
consejería de Sanidad, donde este verano se han encendido las alarmas al
dispararse las listas de espera quirúrgicas del SACYL. ¿Qué esperaban que ocurriera
cuando se cierran quirófanos y se reducen las plantillas profesionales al no
reponer las vacantes dejadas por centenares de médicos jubilados?
Antonio Sáez y Milagros Marcos |
No está claro, puesto que el presidente de la Junta ofreció el dato sin
desglosar, como se van a distribuir los 83 millones de euros reservados a las
consejerías de Educación y Familia en el reparto del suplemento presupuestario.
En ambas hay materia más que sobrada para parchear. Y de tanto efecto social
como la reducción de becas, la denegación de las ayudas a la compra de libros
de texto, el astronómico coste de las matriculas universitarias o la
jibarización de las ayudas a la Dependencia.
De momento el curso escolar 2012-2013 ha comenzado en
Castilla y León con 3.000 alumnos más y el mismo número de profesores que hace
un año.
Pleno de las Cortes de Castilla y León |
De igual
modo que tampoco vamos a pasar por alto que el presidente Herrera presuma, como hizo la otra tarde en las
Cortes, de que la comunidad tiene una Administración “razonablemente austera” y
apoye esa afirmación en falsedades como la de que la mayor parte de los
procuradores de las Cortes no tienen asignado un sueldo o en supuestas verdades
tan falaces como la de que Castilla y León ha renunciado a tener una
televisión autonómica. Un poco más y da por cumplido el compromiso adquirido
en su última investidura (junio 2011) de que a partir de entonces únicamente él y los
nueve consejeros de la Junta
dispondrían de coche oficial…
elblogdepedrovicente@gmail.com 16-9-2013