El topillo
La tramitación de los Presupuestos aplaza dos meses la incertidumbre sobre un adelanto electoral
La tramitación parlamentaria de los Presupuestos de la Comunidad va a suponer dos meses de calma en la convulsa política de Castilla y León. El calendario fijado por la Mesa de las Cortes contempla la votación de las nuevas cuentas el día 23 de diciembre, víspera de Nochebuena, de forma que entrarán en vigor desde el 1 de enero.
La aprobación de los Presupuestos está garantizada gracias al voto del procurador de “Por Ávila”, Pedro Pascual, quien por mucho que advierta que su apoyo al techo de gasto no es un cheque en blanco, respaldará con toda seguridad las cuentas, como ya hizo el año pasado a cambio de las consabidas compensaciones a la provincia abulense.
Con enero volverá la incertidumbre creada en torno a un eventual adelanto electoral de las elecciones autonómicas. El único facultado para hacerlo, el presidente Fernández Mañueco, deberá decidir cómo afronta lo que resta de Legislatura, si bien es obvio es que la opción de disolver y adelantar deberá contar con el visto bueno de Pablo Casado.
Pero caben otras opciones. Si se constata que esa segunda moción de censura que los socialistas pueden presentar a partir del 10 de marzo carece de la menor viabilidad, Mañueco podría prolongar el actual gobierno de coalición, eso sí, tras una profunda remodelación en la que se desprendería de los elementos de C´s que vienen desestabilizándolo.
Y otra fecha es la del 21 de junio. Hasta ese día dispone de plazo el presidente de la Junta para convocar elecciones anticipadas, ya que dicha facultad no rige durante el último año de la Legislatura.
2-Noviembre-2021